33 ideas de decoración de porches con plantas colgantes y macetas hechas a mano

Varias plantas colgantes y macetas decorativas embellecen porches y entradas, con un toque artesanal.

¡Hola! ¿Lista para darle un giro total a tu porche, balcón o esa entrada un poco sosa? Olvídate de las soluciones de siempre. Hoy vamos a jugar con plantas que caen en cascada, macetas que puedes hacer tú misma en una tarde y esos trucos que transforman un espacio cualquiera en tu rincón favorito al aire libre.

Aquí no hay reglas estrictas, solo pura inspiración para que mezcles, combines y te atrevas a crear algo que grite ‘esto es muy mío’.

Vamos a ensuciarnos las manos (¡un poquito!), a reciclar con estilo y a llenar cada centímetro de vida, color y personalidad. Coge tus guantes de jardinería, ¡que empezamos!

1. Ritmo y Repetición: La Elegancia del Macramé en Serie

Porche de madera con mecedoras blancas y helechos colgando en maceteros de macramé blancos.
Un porche sereno es un porche feliz.

Crea una sensación de calma y orden colgando varias macetas idénticas en línea.

El truco está en usar los mismos soportes de macramé y macetas blancas para lograr una simetría visual que tranquiliza la vista.

Para las macetas de abajo, ¡dales un toque personal! Con un rotulador de tiza, dibuja patrones geométricos sencillos en la terracota y luego píntalos con pintura acrílica para exteriores. Un sellador en spray mate protegerá tu diseño del sol y la lluvia.

Los helechos de Boston son perfectos para colgar, ya que sus frondas arqueadas crean una cascada verde preciosa.

2. Tu Huerto Vertical en un Palet: Fresco, Fácil y a la Mano

Jardín vertical hecho con un palet de madera y macetas de terracota con hierbas aromáticas.
Tus especias frescas, a un paso de la cocina.

¿Poco espacio? ¡Piensa en vertical! Un palet es tu mejor amigo para montar un huerto de hierbas aromáticas sin ocupar ni un centímetro del suelo.

Primero, lija bien el palet para quitar astillas y trátalo con un barniz o aceite para exteriores que lo proteja de la humedad.

Luego, grapa un trozo de malla geotextil en la parte inferior y trasera de los huecos que quieras usar como macetero, creando pequeños bolsillos. ¡Ya solo tienes que llenarlos de tierra y plantar tus hierbas favoritas!

Romero, albahaca, menta… Imagina salir a tu porche y cortar lo que necesitas para cocinar. Esto es vida y un gran ejemplo de cómo usar palets reciclados con ingenio.

3. Explosión Bohemia: Más es Más (y Mejor)

Porche bohemio con silla de mimbre pavo real, alfombras de colores y macetas pintadas a mano.
Tu rincón boho te está esperando.

Si lo tuyo es el color y la textura, atrévete a mezclar sin miedo. Este porche es un festival para los sentidos y demuestra que la abundancia bien combinada es espectacular.

La clave es la superposición: combina dos o tres alfombras con patrones diferentes pero en la misma gama de colores. Cuelga maceteros de tela o lana de colores vibrantes y no dudes en pintar tus propias macetas de barro con diseños atrevidos.

La silla pavo real es la reina indiscutible de los estilos boho étnicos. Busca una de segunda mano y dale una capa de barniz marino para que resista al exterior. ¡Un rincón para soñar despierta!

4. Brisa Marina en Terracota: El DIY que Huele a Sal

Porche de estilo costero con macetas de terracota decoradas con conchas y adornos colgantes.
El encanto de la playa, directo a tu puerta.

¿Quieres un toque costero sin caer en lo típico? Este proyecto es para ti y es más fácil de lo que parece.

Recoge conchas y cantos rodados lisos en tu próxima visita a la playa. Con un adhesivo fuerte para exteriores (tipo epoxi o silicona de construcción), pégalos alrededor del borde de tus macetas de terracota. El resultado es sutil, orgánico y súper elegante.

Para los móviles colgantes, usa un trozo de madera de deriva, ata unos hilos de sisal y cuelga más conchas o incluso plantas de aire (Tillandsias), que no necesitan tierra. Así creas rincones de playa en casa llenos de encanto.

5. El Refugio Secreto: Verdes Profundos y Cerámica Esmaltada

Porche oscuro y elegante con grandes macetas de cerámica azul y plantas de hojas verdes exuberantes.
Un oasis de calma en tu propio porche.

Si tu porche es sombrío, ¡celébralo! Conviértelo en un refugio fresco y misterioso jugando con tonos oscuros y plantas exuberantes.

Elige macetas grandes de cerámica esmaltada en colores joya como el azul cobalto o el verde esmeralda. El brillo del esmalte atrapa la poca luz que haya y crea un contraste espectacular con la madera oscura del porche.

Planta especies que amen la sombra, como hostas, helechos y caladios. Sus hojas grandes y texturizadas aportarán todo el dramatismo que necesitas. La idea es crear un rincón que invite al recogimiento y la calma.

6. Escalera Nórdica: Calidez Textil en Cada Peldaño

Macetas de terracota cubiertas con fundas de punto grueso en una escalera de madera.
El estilo nórdico sube de nivel.

Transforma una simple escalera en un expositor de plantas lleno de encanto escandinavo. La clave es la coherencia y la textura.

Consigue macetas de terracota básicas y fórralas con fundas de punto grueso o macramé. Puedes tejerlas tú misma con cuerda de algodón o buscar cestas que se ajusten al tamaño.

Esta idea no solo añade una calidez increíble, sino que también protege las superficies de madera. El contraste entre la terracota cálida y el punto crudo es pura magia nórdica, ideal para rincones nórdicos fáciles de recrear.

7. Sol del Desierto y Tonos Turquesa

Porche de estilo suroeste con paredes de adobe, puerta turquesa y macetas de barro con suculentas.
Un trocito de Nuevo México en tu hogar.

Invoca el espíritu del suroeste americano con esta paleta de colores terrosos y un toque vibrante.

Las paredes de estuco en tonos cálidos (melocotón, arena) son el lienzo perfecto. Combínalas con vigas de madera rústica y una explosión de color en la puerta: un turquesa o un verde menta brillante.

Las macetas de barro sin esmaltar, con sus formas orgánicas y decoraciones tribales, son imprescindibles. Llénalas de suculentas y cactus que resistan el sol. Cuelga un rosario de perlas (Senecio rowleyanus) para un efecto cascada que enamora, una idea perfecta para patios mexicanos llenos de color.

8. Cascada Floral Estilo Campestre: Jardinería por Niveles

Torre de macetas con flores blancas y moradas junto a un rosal trepador en una pared de piedra.
Tu jardín de cuento, hecho realidad.

Crea un impacto visual masivo junto a tu puerta con una torre de flores. ¡Es más sencillo de lo que parece!

Utiliza un soporte para plantas de varios niveles, o apila macetas de distintos tamaños (asegurándote de que sean estables). La clave es llenar cada nivel con flores que tiendan a desbordarse, como las petunias, las calibrachoas (petunias miniatura) o las verbenas.

Combina colores que contrasten, como el morado, el blanco y el fucsia, para un efecto aún más llamativo. A los pies, planta lavanda para añadir aroma y textura. Un rosal trepador en la pared será el broche de oro para un look de cottage inglés.

9. Jungla Tropical con Acento de Madera

Porche cubierto de bambú con grandes macetas de madera y una exuberante vegetación tropical.
Escápate al trópico sin salir de casa.

Transforma tu porche en un exuberante paraíso tropical rodeándote de maderas cálidas y vegetación frondosa.

Si tienes un porche cubierto, un techo de bambú o caña añade una textura increíble y filtra la luz de forma mágica. Las macetas de madera redondeadas aportan un toque orgánico y sofisticado.

Elige plantas con hojas grandes y llamativas: monsteras, arecas, bromelias y orquídeas para un toque de color. Agrupa las macetas a diferentes alturas para crear una sensación de densidad y profundidad, como en un verdadero jardín tropical.

10. Acero, Cemento y Suculentas: El Look Urbano Definitivo

Porche de estilo industrial con maceteros colgantes geométricos y cubos de zinc con suculentas.
La belleza de lo imperfecto y urbano.

Si te va el estilo industrial chic, llévalo al exterior. Este look se basa en materiales crudos y formas geométricas.

Busca maceteros colgantes metálicos con diseños de jaula o prismáticos. Son perfectos para plantas aéreas o pequeñas suculentas. Para el suelo, reutiliza cubos de zinc o metal galvanizado como macetas (¡no olvides hacerles agujeros de drenaje!).

El hormigón visto de la pared, las tuberías a la vista y el acero oxidado de la barandilla completan el ambiente. Las plantas de hojas finas como los pastos ornamentales y las suculentas de formas escultóricas son las compañeras ideales para este estilo.

11. Elegancia Victoriana: Rosas y Porcelana

Entrada de estilo victoriano con macetas de cerámica con dibujos de rosas y helechos colgantes.
Un toque de romance clásico en tu puerta.

Añade un toque de romanticismo clásico a tu entrada con una combinación atemporal: rosales y macetas de cerámica con motivos florales.

Busca macetas de cerámica blanca con delicados dibujos de rosas. Puedes encontrarlas en mercadillos de antigüedades o incluso decorar unas tú misma con la técnica del decoupage, usando servilletas con motivos florales y un barniz especial para exteriores.

Planta rosales de pie o mini en ellas para que el diseño de la maceta y la flor real dialoguen. Dos helechos colgantes en cestas negras aportan simetría y un toque de verde intenso que enmarca la puerta con distinción.

12. Explosión Mid-Century: Patrones Atómicos y Patas de Aguja

Porche de estilo Mid-Century Modern con maceteros sobre patas de madera y una puerta naranja vibrante.
¡El diseño retro nunca pasa de moda!

Viaja en el tiempo a los años 50 y 60 con este look retro lleno de energía y optimismo.

La clave son los maceteros cerámicos sobre soportes de madera con patas de aguja. Busca diseños con patrones geométricos o de estrellas, típicos de la era atómica. ¡Puedes pintar los tuyos con plantillas!

Una puerta de un color vibrante como el naranja o el turquesa es el telón de fondo perfecto. Las plantas araña (Chlorophytum comosum), con sus hojas arqueadas y su aire desenfadado, son la elección ideal para completar este ambiente retro-chic.

13. Decoupage Romántico: Un Toque Shabby Chic

Macetas de terracota decoradas con técnica de decoupage con motivos de rosas sobre un banco blanco.
El encanto de lo hecho a mano con amor.

Dale una nueva vida a tus macetas de terracota con una técnica sencilla y resultona: el decoupage.

Pinta las macetas con pintura a la tiza de color blanco o crema y déjalas secar. Recorta motivos florales de servilletas de papel (usa solo la capa superior, la que tiene el dibujo).

Aplica una capa de cola para decoupage sobre la maceta, coloca el recorte con cuidado y alísalo con un pincel suave. Una vez seco, aplica dos o tres capas más por encima para sellarlo. ¡Importante! Usa un barniz para exteriores al final para protegerlo de la intemperie. Una idea genial para crear decoración romántica.

14. Magia del Bosque: Macetas de Troncos Naturales

Entrada de una cabaña de madera con flores plantadas en maceteros hechos con troncos de árbol.
La naturaleza llama a tu puerta.

Integra tu porche en la naturaleza usando elementos del bosque. Esta idea es perfecta para cabañas o casas de estilo rústico.

Utiliza troncos de abedul o pino de diferentes grosores como maceteros. Con una broca de pala ancha, ahueca el centro del tronco para crear espacio para la tierra y la planta. Si no quieres ahuecarlo, simplemente coloca una maceta más pequeña dentro.

Un tronco más largo tumbado puede servir como una jardinera original. Combina flores silvestres de colores vivos con el verde de las plantas para un contraste vibrante y lleno de vida. Una corona de ramas en la puerta remata este look de jardines rústicos.

15. Encanto Provenzal: Terracota, Lavanda y Geranios Rojos

Fachada de piedra con macetas de terracota de varios tamaños llenas de geranios rojos y lavanda.
Un aire de la campiña francesa.

Transporta un pedacito de la Provenza francesa a tu hogar con esta combinación clásica e infalible.

La base son las grandes macetas de terracota envejecida, que aportan un carácter rústico y atemporal. Agrupa varias de distintos tamaños para crear una composición dinámica.

Planta geranios de un rojo intenso para un estallido de color que contrasta maravillosamente con la piedra de la fachada y el azul lavanda de las contraventanas. No puede faltar una maceta con lavanda, que además de su color, perfumará tu entrada cada vez que pases.

16. El Patio Andaluz: Buganvilla y Cerámica Azul Cobalto

Entrada con arco enmarcada por una buganvilla fucsia y macetas de cerámica azul y blanco en las escaleras.
El sur en tu casa, ¡qué alegría!

Crea un rincón vibrante y lleno de sol con la esencia de los porches al estilo andaluz. El secreto está en la combinación de tres elementos: el blanco de la pared, el fucsia de la buganvilla y el azul de la cerámica.

Utiliza macetas de cerámica pintadas a mano con motivos azules y blancos. Son perfectas para pequeños árboles como naranjos o limoneros, que añaden un toque de frescura y aroma.

Deja que una buganvilla trepe y enmarque la entrada. Su floración espectacular es el alma de este estilo. El suelo de terracota completa esta estampa mediterránea que invita a disfrutar del aire libre.

17. Jardín Zen: Minimalismo y Serenidad

Patio de estilo japonés con suelo de grava, un banco de madera y un helecho colgando de un poste de bambú.
Encuentra tu momento de paz aquí.

Si buscas paz y armonía, inspírate en la estética de los jardines zen. Menos es más, y cada elemento cuenta.

Un único helecho colgante, suspendido de un simple poste de bambú, se convierte en el punto focal. Elige una maceta de cerámica oscura con una textura artesanal.

Crea una base de grava oscura y coloca algunas piedras de río redondeadas de forma estratégica. Un sencillo banco de madera y unas vasijas decorativas son todo lo que necesitas para completar este espacio de meditación. La puerta corredera de estilo shoji refuerza la atmósfera de calma.

18. Esculturas Vivas: Cemento y Acero Corten

Entrada moderna con maceteros de cemento de formas geométricas y plantas colgantes de un soporte metálico.
Cuando el jardín se convierte en arte.

Para una entrada de arquitectura moderna, las plantas y macetas deben ser una declaración de diseño.

Opta por maceteros de hormigón o cemento con formas geométricas irregulares, casi escultóricas. Su aspecto brutalista contrasta de maravilla con la delicadeza de las plantas.

Las plantas ideales son las de formas arquitectónicas, como los agaves, las yucas o el rosario de perlas colgante. El soporte metálico para las plantas colgantes, hecho de un material como el acero corten (con su característico óxido anaranjado), añade un toque industrial y sofisticado que define los patios modernos.

19. Brillo Metálico: Elegancia en Blanco y Negro

Entrada elegante con puerta negra, maceteros plateados colgantes y una maceta grande negra y dorada.
La sofisticación está en los detalles.

Logra un look sofisticado y atemporal con una paleta de colores restringida y un toque de brillo.

Apuesta por maceteros metálicos plateados para un aire de glamour. Puedes colgarlos en cascada junto a la puerta, creando una línea vertical que estiliza la entrada. Una maceta grande en negro y dorado en el suelo ancla la composición.

La clave del éxito es usar la misma planta en todas las macetas. La planta araña es perfecta por su sencillez y sus hojas verdes y blancas, que se integran a la perfección en la paleta de colores. El suelo de damero en blanco y negro es el toque final para un look clásico e impecable.

20. Cosecha de Otoño: Calabazas y Crisantemos

Porche decorado para el otoño con calabazas, crisantemos de colores y fardos de paja.
¡Bienvenido, otoño, con tu encanto!

Cuando llega el otoño, transforma tu porche en un cálido y acogedor rincón estacional.

Usa calabazas de diferentes tamaños y colores como si fueran parte de la decoración. No solo las coloques en el suelo, ¡úsales como maceteros! Simplemente ahueca una calabaza grande y coloca una maceta de crisantemos dentro. ¡Dura varias semanas!

Los crisantemos en tonos naranjas, amarillos y burdeos son las flores estrella de la temporada. Para colgar, usa cubos de metal galvanizado que le dan un aire de granja. Unos fardos de paja o tallos de maíz secos y una manta de cuadros completan la estampa otoñal perfecta. Esta es una forma genial de adaptar tu casa a cada temporada.

21. Noches Mágicas: Macramé Iluminado

Porche de noche iluminado con guirnaldas de luces LED entrelazadas en soportes de macramé.
Donde las noches de verano son eternas.

Convierte tu porche en un rincón de cuento de hadas cuando caiga el sol. El secreto es la iluminación cálida y suave.

Entrelaza guirnaldas de luces LED a pilas o solares (las de alambre de cobre son ideales) a través de tus soportes de macramé. El efecto es mágico, ya que la luz destaca los nudos y crea un ambiente íntimo y acogedor.

Añade cojines y alfombras en el suelo para crear una zona chill out. Y para un toque extra de encanto, pinta tus macetas de terracota con pintura que brilla en la oscuridad. Puedes hacer patrones de lunas y estrellas. ¡Perfecto para crear un porche acogedor para noches de verano!

22. Tesoros del Mar: Macetas DIY con Conchas

Macetas de terracota decoradas con un mosaico de pequeñas conchas marinas, con geranios rojos.
El mar, pegado a tus plantas.

Añade una textura sorprendente y un aire marinero a tus macetas con este sencillo proyecto DIY.

Necesitarás macetas de terracota, una buena cantidad de conchas pequeñas (las de berberecho o similares funcionan genial) y un adhesivo de construcción fuerte o cemento cola.

Aplica una capa de adhesivo alrededor de la maceta y ve colocando las conchas, presionando ligeramente. Puedes cubrirla por completo o solo una franja. Una vez seco, puedes darle una capa de lechada blanca y limpiarla para rellenar los huecos, ¡como si fuera un mosaico! Un look costero, pero con un giro artesanal.

23. Jardinería de Interior… ¡en la Puerta!

Rejilla metálica negra junto a una puerta con pequeñas macetas de terracota con hierbas.
No hay espacio pequeño, sino ideas grandes.

¿Tu entrada es un pasillo estrecho o un espacio interior? ¡No renuncies al verde!

Aprovecha el espacio vertical junto a la puerta con un organizador de rejilla metálica. Es una solución limpia, moderna y muy práctica para convertir un pasillo estrecho en un rincón funcional.

Simplemente cuelga pequeñas macetas de terracota con ganchos en forma de S. Es ideal para un mini huerto de hierbas aromáticas si tienes algo de luz. Si no, opta por plantas resistentes de interior como el potos o la sansevieria. Un romero colgante en la puerta añade un toque original y perfumado.

24. Jardinería con Chispa: ¡Escurridor y Botas al Rescate!

Un escurridor amarillo colgado en la pared y unas botas de agua de colores usados como macetas.
¡Aquí todo puede ser una maceta!

¡La maceta perfecta puede ser cualquier cosa! Dale una segunda vida a objetos cotidianos con un poco de imaginación.

Un viejo escurridor de metal es un macetero colgante ideal: ¡ya viene con agujeros de drenaje! Píntalo de un color alegre con pintura en spray para metal. Unas botas de agua infantiles que se han quedado pequeñas son macetas de suelo adorables y llenas de color. Solo tienes que hacer unos agujeros en la suela con un taladro.

Planta flores sencillas y alegres como los pensamientos. Este tipo de decoración con materiales reciclados le da a tu porche un toque divertido y único.

25. Refugio en el Bosque: Terracota y Verdes Sombríos

Porche de madera rodeado de bosque con grandes macetas de terracota y cerámica verde llenas de helechos.
Un rincón para conectar con la naturaleza.

Crea un ambiente de cabaña en el bosque, incluso si vives en la ciudad. La clave es la paleta de colores y la abundancia de vegetación.

Utiliza macetas de barro y cerámica en tonos naturales y oscuros: terracota, verde musgo, marrón. Las formas robustas y orgánicas funcionan mejor. Agrupa varias macetas grandes en un murete de piedra para crear un punto focal.

Elige principalmente plantas de follaje, como helechos de diferentes tipos. Sus texturas y tonos de verde crearán una sensación de estar inmerso en la naturaleza. Las macetas colgantes esmaltadas en verde oscuro añaden un toque de color sutil que se integra perfectamente en el paisaje.

26. Invierno Nórdico: Copos de Nieve y Mini Abetos

Decoración invernal en un porche con macetas blancas pintadas con copos de nieve azules y mini abetos.
El invierno también tiene su encanto.

La decoración del porche no es solo para el verano. Dale la bienvenida al invierno con un toque escandinavo, fresco y minimalista.

Pinta unas macetas de blanco y, con una plantilla y pintura azul, estampa unos sencillos copos de nieve. Es un DIY fácil que transforma por completo el ambiente.

Planta pequeños abetos o pinos enanos. Aportan el toque verde y festivo sin ser excesivos. Unos farolillos blancos con velas y maceteros colgantes geométricos con flores blancas completan esta escena invernal, serena y elegante.

27. Atardecer en el Desierto: Cactus, Tejidos y Luz Dorada

Porche al atardecer con paredes de adobe, cactus en macetas de barro y cestas colgantes de colores.
Donde el sol siempre parece estar poniéndose.

Captura la magia de la hora dorada en un porche de inspiración desértica. Los colores cálidos y las texturas naturales son los protagonistas.

Combina macetas de terracota con cestas colgantes tejidas con lanas de colores vivos. El contraste es vibrante y artesanal. Agrupa diferentes tipos de cactus y suculentas para jugar con las formas y las alturas.

Una alfombra o tapete tejido con patrones geométricos en tonos tierra, rojos y naranjas, ancla el espacio y le da un toque extra de calidez. El resultado es un rincón que parece bañado por el sol del atardecer a cualquier hora del día, con claros ambientes boho chic.

28. Un Sendero de Flores bajo la Lluvia

Camino de piedra hacia una puerta en un día lluvioso, flanqueado por macetas de terracota con flores.
La belleza también florece en los días grises.

Un porche bien diseñado es hermoso incluso en un día lluvioso. Crea una bienvenida floral que te alegre la vista sin importar el tiempo que haga.

Alinea una serie de macetas de terracota a lo largo del camino que lleva a tu puerta. La repetición crea un ritmo visual muy agradable.

Planta flores resistentes y de colores vivos, como los pensamientos o las petunias. Cuelga cestas con plantas de hoja verde como la hiedra, que lucen especialmente brillantes y frescas con las gotas de lluvia. El sonido de la lluvia y el olor a tierra mojada harán el resto.

29. Muro de Color: Un Jardín Vertical con Latas Recicladas

Jardín vertical hecho con latas de metal recicladas y pintadas de colores vivos sobre una pared de ladrillo.
Recicla, planta y llena de color tu pared.

¡Dale un uso increíblemente creativo a las latas de conservas! Este jardín vertical es un proyecto de reciclaje lleno de color y vida.

Limpia bien las latas, quítales las etiquetas y hazles un par de agujeros en el fondo para el drenaje. Píntalas con spray para metal de diferentes colores vivos. ¡Cuanto más variado, mejor!

Atorníllalas a un panel de madera o una celosía y llénalas de tierra. Son perfectas para plantas pequeñas y colgantes como el potos o la tradescantia, que con el tiempo cubrirán la estructura y crearán un tapiz vegetal salpicado de color.

30. Drama Nocturno: Follaje Oscuro y Luz Tenue

Porche de noche con luz cálida, con macetas de cerámica oscura llenas de plantas de follaje morado.
El jardín también vive de noche.

De noche, tu porche puede transformarse en un espacio íntimo y lleno de misterio. El secreto está en jugar con las sombras y la luz indirecta.

Elige plantas con follaje oscuro o de colores profundos, como el trébol morado (Oxalis triangularis) o algunas variedades de coleo. Sus hojas casi negras crean siluetas espectaculares bajo la luz artificial.

Usa macetas de cerámica esmaltada en tonos oscuros, como el azul noche o el negro brillante, que reflejarán sutilmente la luz de un aplique o farol. El resultado es un ambiente sofisticado, dramático y muy elegante.

31. La Estantería de las Suculentas: Orden y Color

Estantería de madera y metal con varios niveles llenos de pequeñas macetas de colores con suculentas.
Tu colección de suculentas, la protagonista.

Si eres un coleccionista de suculentas, ¡exhíbelas como se merecen! Una estantería tipo escalera es la solución perfecta.

Elige macetas pequeñas de colores vivos y coordinados. Una paleta de amarillos, naranjas y turquesas crea un look alegre y cohesivo. Alterna los colores en las baldas para un efecto dinámico.

Esta es una forma genial de mantener tus suculentas organizadas y asegurarte de que todas reciben la luz que necesitan. Un helecho colgante en la parte superior añade un toque de verde exuberante y equilibra la composición. Es ideal para estanterías de madera pensadas para macetas.

32. Jardineras Rústicas y Aromas del Campo

Porche rústico con jardineras de madera blanca desgastada y macetas colgantes con hierbas aromáticas.
El aroma del campo, en tu propia casa.

Crea una auténtica cocina exterior de hierbas aromáticas con jardineras de madera de estilo rústico.

Puedes construir estas jardineras con tablas de palets o madera recuperada. Píntalas con pintura a la tiza blanca y luego líjalas ligeramente en los bordes para darles un aspecto desgastado y vivido.

Combina macetas colgantes de terracota con las jardineras de pared. Planta una gran variedad de hierbas: tomillo, orégano, albahaca, romero… Y no te olvides de colgar unos ramos de lavanda seca para un toque decorativo y aromático que te transportará al campo.

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