24 tapices de macramé con cuentas de madera para un look artesanal

Tapices de macramé con cuentas de madera y un estante colgante, resaltando un look artesanal único en la decoración.

¡Hola, artista! ¿Lista para darle a tus paredes un toque cálido y personal? Olvídate de los cuadros aburridos, porque hoy vamos a sumergirnos en el maravilloso mundo del macramé con cuentas de madera.

Te voy a enseñar cómo unos simples nudos y unas bolitas de madera pueden transformarse en una pieza de arte que grite “hogar”. No necesitas ser una experta, solo ganas de crear algo bonito con tus propias manos.

Prepárate para descubrir trucos que harán que tus diseños pasen de “principiante” a “¡wow, dónde lo compraste!”. Coge tu cordón, elige tus cuentas favoritas, ¡y vamos a anudar juntas!

1. El clásico diamante que nunca falla

Tapiz de macramé grande con patrón de rombos y cuentas de madera oscura colgado en una pared.
Textura y contraste en cada nudo.

Empieza tu obra maestra con un diseño de rombos que siempre impresiona.

El truco para que las cuentas oscuras resalten es usar un cordón de algodón crudo bien grueso, de unos 5 mm.

Para que el patrón quede perfecto, comienza anudando el diamante central y trabaja hacia afuera. Así, mantendrás la simetría sin esfuerzo.

Añade las cuentas de madera en las intersecciones de los rombos para un toque de contraste que captura la mirada al instante.

2. Magia natural con madera de deriva

Tapiz de macramé color crema con cuentas de madera clara colgado de una rama de madera de deriva.
La belleza de lo imperfecto y natural.

Sal a caminar por la playa o un río cercano para encontrar una rama única que sirva de base. ¡La naturaleza te da los mejores materiales!

Combina cuentas de madera clara de distintos tamaños, desde 15 mm hasta 25 mm, para crear un efecto de cascada lleno de movimiento y profundidad.

El secreto de este look etéreo es dejar muchos flecos sueltos y de diferentes longitudes en la parte inferior. No busques la perfección, sino la fluidez.

Este es uno de los diseños de macramé para decorar paredes pequeñas con estilo boho que más personalidad aporta.

3. Minimalismo chic con un toque metálico

Tapiz de macramé minimalista de color gris con cuentas de madera cuadradas y una barra de cobre.
Menos nudos, más impacto.

Sustituye la clásica vara de madera por un tubo de cobre fino para un acabado moderno y sofisticado. Lo encuentras en cualquier ferretería.

Usa un cordón de color gris oscuro o negro para un contraste elegante que se aleja de lo tradicional.

Agrupa las cuentas de madera en pequeños bloques geométricos en lugar de dispersarlas. Este detalle simple crea un punto focal súper contemporáneo.

4. Atrapasueños en versión mandala

Tapiz de macramé en forma de mandala dentro de un aro metálico dorado, con cuentas de madera.
Tu propio sol hecho de nudos.

¡Usa un aro metálico dorado como base para este diseño circular!

Para empezar, asegura los hilos iniciales al aro con un nudo alondra bien apretado para que no se deslicen mientras trabajas.

Crea el patrón radial trabajando desde el centro hacia afuera, como los rayos del sol. Las cuentas de madera marcan los picos de cada “estrella”, dándole un ritmo visual increíble.

Finaliza con una sección de flecos solo en la parte inferior para enmarcar el diseño sin sobrecargarlo.

5. Un chapuzón de color degradado

Tapiz de macramé con efecto degradado de turquesa a naranja y una fila de cuentas de madera.
Pinta tu mundo con hilos.

Este efecto ombré es más fácil de lo que parece. Necesitas tinte para tela líquido y un recipiente grande.

La clave para el degradado es sumergir el tapiz por secciones, dejando cada una un tiempo diferente en el tinte. Empieza por la parte que quieres más oscura y ve subiendo.

Utiliza cordón de algodón 100% para que el color se absorba de manera uniforme y vibrante. ¡Los sintéticos no funcionan igual!

Una hilera de cuentas de madera natural justo donde empieza el color crea una transición visual limpia y profesional.

6. El encanto rústico del yute

Tapiz de macramé hecho con cordón de yute rústico y cuentas de madera ovaladas sobre un fondo de madera.
Calidez rústica en estado puro.

Cambia el algodón por cordón de yute o cáñamo para conseguir una textura más rústica y orgánica.

Este diseño destaca por sus “alas” laterales hechas con nudos diagonales y mucho fleco desflecado. ¡Usa un peine para mascotas para abrirlos y darles volumen!

Las cuentas de madera ovaladas en el centro alargan visualmente la pieza y guían la mirada hacia abajo.

Combínalo con ideas para decorar con madera reciclada en el dormitorio para un look totalmente campestre.

7. Organización con bolsillos tejidos

Colgador de pared de macramé con dos bolsillos para guardar correo y una fila de cuentas de madera.
Bonito, práctico y hecho por ti.

¡Un tapiz que además es funcional! Ideal para el recibidor o tu rincón de trabajo.

Para crear los bolsillos, simplemente teje una sección rectangular y luego une los bordes laterales y el inferior a la pieza principal con más nudos.

Una fila de cuentas de madera en la base, justo antes de los flecos, le da un acabado pulido y un peso que ayuda a que cuelgue recto.

Es una de las ideas prácticas para entradas pequeñas en departamentos con poco espacio que más estilo aporta.

8. Un búho sabio para tu pared

Tapiz de macramé con forma de búho, con grandes cuentas de madera como ojos y ramas naturales.
Una mirada que decora.

¡Este proyecto es pura diversión! Los ojos son los protagonistas: usa dos cuentas de madera grandes y planas como base.

Para crear el efecto de plumas alrededor de los ojos, haz círculos de nudos festón y luego desfleca las puntas con un peine.

El cuerpo se teje con el clásico nudo plano, creando una textura densa que imita el plumaje. ¡No olvides añadir las alas con flecos a los lados!

Dos pequeñas ramas, una arriba y otra abajo, le dan la estructura perfecta para que tu búho se pose en la pared.

9. Texturas tejidas con bloques de color

Tapiz tejido a mano con franjas de colores mostaza, terracota y negro, y flecos en la parte inferior.
Teje tu propia historia de color.

Aquí cambiamos los nudos por el tejido en telar, una técnica prima hermana del macramé que te encantará probar.

Elige una paleta de colores cálidos, como mostaza, terracota y negro, para un look otoñal y acogedor.

Juega con diferentes grosores de hilo en las secciones negras para añadir una textura inesperada que rompa con la uniformidad del tejido.

Este tipo de pieza es un ejemplo genial de cómo integrar arte mural DIY en la decoración de tu dormitorio de forma original.

10. Serenidad en verde salvia

Tapiz de macramé largo y estrecho de color verde salvia con cuentas de madera clara distribuidas.
Un toque de color y calma.

Elige un solo color de cordón, como este verde salvia, para un resultado que inspira calma y elegancia.

Aunque el patrón de rombos es complejo, el color unificado hace que la pieza se sienta serena y no recargada.

Las cuentas de madera clara salpican el diseño, aportando pequeños puntos de luz que rompen la monotonía del color y añaden un toque natural.

11. El árbol de la vida en un aro

Tapiz de macramé del árbol de la vida dentro de un aro de madera, con cuentas como frutos.
Teje tus raíces y deja que florezcan.

Este simbólico diseño es un proyecto con alma. Comienza por el tronco, envolviendo un grupo central de hilos con un nudo de envoltura.

Luego, divide los hilos para crear las ramas, usando nudos simples y retorcidos para darles una forma orgánica y natural.

Inserta las cuentas de madera en las ramas como si fueran frutos o brotes, distribuyéndolas de forma irregular para un look más realista.

La luz del sol atravesando el diseño crea un efecto mágico en la pared.

12. Galería de tapices para un gran impacto

Cinco paneles de macramé idénticos colgados en una larga rama sobre una mesa de comedor.
La unión hace la fuerza decorativa.

¿Tienes una pared grande y vacía? Crea cinco paneles más pequeños y cuélgalos juntos en una rama larga.

Mantén el mismo patrón base en todos los paneles para lograr cohesión, pero puedes variar sutilmente la cantidad de flecos o la posición de las cuentas.

El truco para que se vea como una sola pieza es dejar el mismo espacio entre cada panel. ¡Usa una cinta métrica!

Esta técnica es una de las mejores formas de alinear cuadros de piso a techo en la sala, pero con textura textil.

13. Estante flotante con encanto boho

Estante de madera colgante sostenido por cuerdas de macramé con cuentas de madera.
Funcionalidad que enamora.

Combina macramé y una bonita tabla de madera con borde natural para crear un estante único.

El secreto para que el estante quede nivelado es anudar las cuatro cuerdas de soporte exactamente a la misma altura. Hazlo sobre una mesa para asegurarte.

Ensarta cuentas de madera grandes en las cuerdas de soporte para transformar un elemento funcional en un detalle decorativo.

Perfecto para una pequeña planta suculenta y una vela aromática.

14. Elegancia en forma de media luna

Tapiz de macramé en forma de media luna dentro de un aro metálico, colgado sobre una cama.
Un collar para tu pared.

Este diseño tipo collar es pura sofisticación. Utiliza un aro metálico grande y concentra todo el trabajo de nudos en la mitad inferior.

El espacio vacío en la parte superior del aro crea un contraste visual muy potente y le da un aire ligero y minimalista.

Crea hileras de cuentas de madera que sigan la curva del diseño, acentuando la forma de media luna.

Ideal para colgar sobre la cama, aportando un toque de ensueño a tus habitaciones femeninas nórdicas.

15. Borgoña intenso y borlas con carácter

Pequeño tapiz de macramé de color borgoña con borlas gruesas y cuentas de madera variadas.
Color y textura con personalidad.

Atrévete con un color profundo como el borgoña para un resultado dramático y elegante.

El truco para unas borlas gruesas y perfectas es enrollar el hilo muchas veces sobre un trozo de cartón antes de atarlas.

Combina cuentas de madera lisas con otras grabadas o con patrones para añadir un extra de detalle artesanal.

Este tapiz es ideal para ambientar una sala con tonos tierra y darle un toque de color vibrante.

16. Inspiración del suroeste a todo color

Tapiz de macramé en forma de V con colores terracota, turquesa y crudo, y pequeñas borlas.
Un atardecer del desierto en tu pared.

¡La paleta de colores lo es todo! Combina terracota, turquesa y crudo para evocar los paisajes desérticos.

Planifica tu diseño en un papel antes de empezar para saber exactamente dónde cambiar de color. El nudo de alondra invertido es genial para introducir nuevos hilos.

Las pequeñas borlas turquesas en la parte inferior son el toque final perfecto, añadiendo un pop de color y movimiento.

Este estilo es perfecto para rincones de dormitorio con estilo bohemio para almas libres y soñadoras.

17. Delicadeza de encaje tejido

Detalle de un tapiz de macramé muy fino y delicado, con pequeñas cuentas de madera dispersas.
Tan ligero como un susurro.

Para lograr este efecto etéreo y similar al encaje, utiliza un cordón de algodón mucho más fino, de 1 o 2 mm.

La técnica se basa en nudos muy pequeños y espaciados, creando una red delicada en lugar de un tejido denso.

Salpica la pieza con cuentas de madera muy pequeñas y de diferentes tonalidades para simular gotas de rocío atrapadas en una telaraña.

Es una pieza sutil que no abruma, ideal para un rincón de inspiración espiritual.

18. Un cabecero de cama monumental

Gran tapiz de macramé utilizado como cabecero de cama, con una línea horizontal de cuentas de madera.
Dulces sueños entre nudos.

¿Por qué no llevar el macramé al siguiente nivel y crear un cabecero de cama?

Para un proyecto de esta envergadura, te recomendamos usar un perchero de ropa como soporte de trabajo. ¡Te salvará la espalda!

Alterna secciones de nudos densos con otras más abiertas para crear un patrón rítmico que no resulte pesado a la vista.

Una simple línea horizontal de cuentas de madera a media altura define el diseño y le da un toque de elegancia artesanal.

19. Espejo sol con flecos radiantes

Espejo redondo enmarcado con un elaborado diseño de macramé en forma de sol y cuentas de madera.
Refleja tu lado más creativo.

Transforma un espejo redondo básico en una pieza de diseño espectacular.

Trabaja directamente sobre el marco del espejo, anudando los hilos alrededor de él como si fuera un aro.

El efecto “rayo de sol” se logra con nudos festón que crean picos y luego se desflecan. ¡No tengas miedo de peinar y recortar para que queden perfectos!

Inserta una cuenta de madera en la base de cada “rayo” para un acabado bohemio y chic.

20. Estación de esquejes colgante

Colgador de pared de macramé con cinco frascos de vidrio para esquejes de plantas y cuentas de madera.
La vida se abre camino entre nudos.

¡Para las amantes de las plantas! Un diseño que fusiona macramé y jardinería.

La clave está en crear pequeñas “cestas” o soportes con nudos cuadrados para sujetar unos frascos de cristal o probetas.

Coloca una cuenta de madera grande justo debajo de cada frasco. No solo decora, sino que también le da estabilidad a la base.

Es una forma preciosa de ver crecer las raíces de tus nuevas plantitas y una de las formas de integrar plantas colgantes en la decoración de tu habitación más originales.

21. Escultura textil asimétrica

Tapiz de macramé de forma libre y asimétrica sobre una rama curva, con cuentas de varios tonos.
El arte de anudar sin reglas.

Libérate de los patrones y crea una pieza de forma libre. Deja que la silueta de una rama con curvas guíe tu diseño.

Combina nudos muy apretados con secciones de hilos sueltos, creando un juego de texturas y densidades.

Usa cuentas de madera de diferentes tamaños y tonos (claras y oscuras) y agrúpalas de forma orgánica, como si hubieran crecido allí.

Este tipo de cuadros abstractos DIY pero en versión textil es perfecto para una pared que necesita un toque artístico.

22. Móvil de plumas livianas

Móvil de macramé con varias plumas tejidas colgando a diferentes alturas, con cuentas de madera.
Ligero como una pluma, bello como un sueño.

Este móvil es delicado y relajante. El secreto para hacer las plumas es anudar pequeños trozos de hilo a una cuerda central y luego peinarlos y recortarlos.

Puedes endurecer ligeramente las plumas con un poco de laca para el pelo para que mantengan su forma.

Cuelga cada pluma de una vara a diferentes alturas, usando una o dos cuentas de madera como tope y detalle decorativo en cada hilo.

Perfecto para un rincón de lectura acogedor, donde el suave movimiento de las plumas invita a la calma.

23. Lluvia de cuentas y nudos

Tapiz de macramé con múltiples hileras y capas de cuentas de madera clara, creando una cortina texturizada.
Cuando las cuentas son la estrella.

Aquí las cuentas de madera son las verdaderas protagonistas, no solo un acento.

Utiliza dos o más varillas de madera a diferentes alturas para crear capas y una sensación de profundidad.

Alterna hileras de cuentas con secciones de nudos sencillos. Las cuentas crean una especie de cortina texturizada que es visualmente fascinante.

Este diseño es ideal para añadir mucha textura a una pared sin usar colores llamativos.

24. El guardián de tus recuerdos

Colgador de pared de macramé diseñado para sostener fotos familiares, con cuentas de madera decorativas.
Tus mejores momentos, tejidos a mano.

Un tapiz que se convierte en un marco de fotos familiar, ¡qué gran idea!

Diseña un patrón en forma de V o zigzag que cree espacios naturales para colocar tus fotos. Puedes sujetarlas con mini pinzas de madera.

Coloca las cuentas de madera en puntos estratégicos para añadir peso y definición al diseño, sin robarle protagonismo a las imágenes.

Es una alternativa cálida y artesanal a la típica galería de fotos familiares moderna y elegante.

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